La hemodiálisis es una terapia de reemplazo renal que se utiliza en gran medida para sustituir la función principal de los riñones que consta en eliminar toxinas de la sangre, equilibrar los niveles de electrolitos séricos y remover agua en nuestro organismo mediante la extracción y filtración de la sangre a través de un filtro especial. La hemodiálisis se emplea en pacientes que han perdido la función renal normal.
Pacientes con lesión renal aguda o enfermedad renal crónica, entre otras condiciones causadas por diversas etiologías como diabetes, hipertensión arterial, enfermedades autoinmunes, entre otras. Tu médico nefrólogo será el encargado de determinar si este tipo de tratamiento es para ti.
Recomendamos seguir todas las indicaciones de tu médico nefrólogo, desde tener una alimentación sana, hasta tomar todos los medicamentos prescritos para el control adecuado de tu enfermedad de base. Se recomienda mantener un buen seguimiento de control con tu especialista.
Es común presentar algunos síntomas como cansancio, fatiga, sueño, calambres o mareos. Cada paciente es diferente, pero si tienes alguna preocupación recomendamos ponerte en contacto con tu nefrólogo para platicarle tus síntomas.
Muchos pacientes que logran un adecuado control de su enfermedad renal pueden tener un estilo de vida muy normal. Sin embargo, es necesario tomar precauciones al manejar, realizar ejercicio o trabajar, siempre escuchando a tu cuerpo y descansar si presentas algún malestar. Platica con tu nefrólogo acerca de tus metas y expectativas.
No asistir a tus sesiones de hemodiálisis puede traer consigo complicaciones serias para tu salud. Es importante ser constante y cuidarte para lograr un buen control de tu enfermedad renal, si no puedes acudir a una de tus sesiones, platica con nosotros para reagendar tu cita.
Si, existen otras alternativas a la hemodiálisis como la diálisis peritoneal o un trasplante de riñón. Consulta con tu médico nefrólogo cual es la mejor alternativa para ti.